lunes, 30 de mayo de 2011

Libro “El arte"– Capítulo 10

SALTO

Tenemos, sentimos la necesidad de crear, de formar, como alimento, algo que nos eleve del fango en donde estamos; y esto no quiere decir que el fango sea algo malo; sino que, así como al quedar expuestos al aire y tener que habernos, creado, formado, los pulmones para respirar; hoy estamos nuevamente a la intemperie, en lo sin respuesta; y es allí cabalmente que tenemos, sentimos, la necesidad de crear, de formar un conjunto no solo de respuestas sino de cosas bellas, capaces de ser respiradas por nuestro espíritu.
Ese espíritu que ha cambiado también y ahora es el creador, el formador de eso mismo que tiene que respirar, es decir formador de su nuevo alimento.
Tal vez por primera vez que en el hombre, que en el animal que piensa, no tiene que recibir de afuera, de la tierra o de la naturaleza, su nuevo alimento, sino que el mismo se lo tiene que crear, más aún fabricar.
Gelhen decía, que la cultura es algo que hace de y a la naturaleza algo útil; es decir que ya la cultura, al crear, al formar la cultura, el hombre, más aún el espíritu del hombre estaba transformando a la naturaleza en algo útil, para el, algo que le permitía crear, formar, transformar a la misma naturaleza, en algo que al mismo espíritu, lo transformase.
Hoy tenemos frente a nosotros mismos, un mundo, el mundo mismo, ya que esa parte nueva, esa parte transformada ha creado al mundo, lo ha hecho humano al animal que piensa, lo ha transformado en eso nuevo, desde hace tiempo es, lo que hemos llamado: humanidad.
Estamos en el mundo, vivimos más en el que en la naturaleza; las técnicas, las ciencias, lo están demostrando, nos están demostrando; vivimos en un mundo, que es en parte virtual, es decir no es natural.
Tenemos los libros, las artes, las ciencias en sí, creadas, formadas, como para habitar aquello, que sentimos la necesidad de tener, más aún de conocer.
¿No es el mismo conocimiento algo virtual? ¿No es también el pensamiento, aquello que imaginamos, aquello que creamos, para luego formar una idea? ¿No es la misma idea algo virtual ya?
Es como si viviéramos en algo así como dos mundos, un mundo el real, en el que pasan las cosas de todos los días y otro virtual, que es imaginado, pensado, y al cual recurrimos para poder habitar con más precisión, como más sensatez, con mayor profundidad, las cosas de nuestro querido mundo real.
Allí es donde podemos ver con más claridad, en esos instantes, puntos, espacios de tiempo; algo así como atmósfera que el arte crea, que el arte permite que se forme, como un lenguaje nuevo, ese lenguaje que permite que el diálogo entre los dos mundos, para crear, para formar un tercero: el mundo espiritual.
Es como si fuera en tercer eje, el eje Z, el que se eleva de aquel plano formado por el mundo virtual y el natural.
Pero primero para poder habitarlo tenemos que crear su atmósfera; nos debemos preguntar: ¿No es la cultura ya su atmósfera? Aquella naturaleza transformada.
¿No es la atmósfera, aquello formado por parte del agua y la tierra: hidrogeno, oxigeno, nitrógenos, etc.? ¿No es aquello ya: la música, la pintura, la poesía, sus elementos que están creando, que están formando la nueva atmósfera?
¿No es el mundo espiritual ese nuevo habitad, ese nuevo lugar, ese nuevo espacio, más independiente del tiempo que los otros dos? ¿No es acaso la evolución, aquello, aquel camino, que nos permite, que nos hace más independientes del tiempo? ¿No es acaso el tiempo nuestra capa, nuestra piel, nuestro capullo del cual nos desprenderemos algún día para ser nosotros mismos?
El arte visto así, es solo como un nuevo paso, un nuevo escalón, un pequeño salto, no sólo paso, que hace el espíritu para volver a ser espíritu.

Karigüe

ÚLTIMO CAPÍTULO DE CORTECÍA. Si desea adquirir el libro completo de "El arte" en formato electrónico, puede solicitarlo enviando un email a info@karigue.com.ar

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viernes, 27 de mayo de 2011

Poema - Realidad

¿Qué pasa
si todo fue
para que tu estés?

El vacío
La eternidad
El universo
El mundo

Y tu allí contemplándolos
a todos juntos

Tu el mar
y ellos los ríos

Comienzas entonces
a escribirlos, a describirlos

y ellos como niños
forman fila

Te despiertas
con un sabor
parecido a la realidad.

Karigüe

miércoles, 25 de mayo de 2011

Frases Célebres sobre el Genio

1.- El secreto de la genialidad es el de conservar el espíritu del niño hasta la vejez, lo cual quiere decir nunca perder el entusiasmo. (Aldous Huxley)

2.- Genio es el que es capaz de ver la idea en el fenómeno. (Schopenhauer)

3.-La genialidad es una celebración de la naturaleza, cuando un espíritu vuela afuera de su alma. (Karigüe)

4. Quien piensa a lo grande tiene que equivocarse a lo grande. (Heidegger)

5.- Lo real es lo imposible. (Lacan)

6.- Todavía no se han levantado las barreras que le digan al genio: "De aquí no pasarás". (Beethoven)

7.-El genio se compone del dos por ciento de talento y del noventa y ocho por ciento de perseverante aplicación. (Beethoven)

8.-El pintor persigue la línea y el color, pero su fin es la Poesía. (Rembrandt)

9.-Toda ciencia se convierte en poesía después de haberse convertido en filosofía. (Novalis)

10.-El genio capta, captura su esencia y la transforma en presencia. (Karigüe)

11.-Buscad dentro de vosotros y lo encontraréis todo, y alegraos de que allá fuera, o como queráis llamarlo, haya una naturaleza que diga sí y amén a todo cuanto habéis hallado en vosotros. (Goethe)

12.-Los genios son peligrosos para los talentos jóvenes, pues no hacen más que reproducirlos creyendo reproducirse a sí mismo. (Goethe)

13.-Sea lo que sea que puedas o sueñes que puedas, comiénzalo. Atrevimiento posee genio, poder y magia. Comiénzalo ahora. (Goethe)

14.-Ser feliz en la contemplación serena, con la voluntad extinguida, sin la codicia y el afán del egoísmo, frío y gris de pies a cabeza, pero con ojos ebrios de luna. (Nietzsche)

15.-La genialidad consiste en la objetividad del intelecto. (Schopemhauer)

16.- El genio es la punta de lanza que penetra en la oscuridad y el silencio que somos, por él la sangre del mundo se purifica. (Karigüe)

17.-Para tener ideas originales, extraordinarias y quizá hasta inmortales, basta quedar extraño completamente al mundo y a las cosas por un momento. (Schopemhauer)

18- Nada más peligroso que una idea, cuando no se tiene mas que una. (Ghartier)

19.-Cuando un poeta canta estamos en sus manos: él es el que sabe despertar en nosotros aquellas fuerzas secretas; sus palabras nos descubren un mundo maravilloso que antes no conocíamos. (Novalis)


Las Frases Célebres sobre el Genio o Citas Célebres sobre el Genio fueron especialmente seleccionadas por Karigüe para sus lectores. (Frases de Genialidad y Citas de Genialidad )

Poema - Transportadores de sueños

caminas
por esos caminos que te
reconocen

los ves en primavera
cómo se visten con esos
colores que brotan de los árboles,

a veces tropiezas con esas
raíces que rebalsan por
si mismas

como si las mismas raíces
quisieran ver en que se han
convertido
en que han llegado a ser
cuando las flores desprendidas
se marchitan

es como si el espíritu y
la savia fueron lo mismo,
transportadores de sueños
de la tierra

de el alma.

Karigüe

lunes, 23 de mayo de 2011

Libro “El arte"– Capítulo 9

LA ESPIRITUALIDAD

El alma son movimientos internos; es tan profunda como el mar; todo un mundo interior, al cual no solo desconocemos sino ignoramos también.
Decimos espíritu, ánimo, voluntad; creador de un mundo espiritual, dentro de ese mundo privado, interno, interior, que es el alma.
Ya lo estamos haciendo como lo hizo Hipócrates, al abrir el cuerpo mundo y encontrar, ver tal vez por primera vez esas partes, esos órganos, esos sistemas, de los cuales estaba formado.
¿No estamos haciendo ahora lo mismo, pero con nuestra alma, con nuestro mundo interior, con nuestra interioridad?
Descubrimos también al corazón, aquel órgano interno que nos hace sentir, con el que registramos nuestras afectividades, deseos, esperanzas, sueños etc.; con el que amamos; con el que al percibir esas afectividades nos sintiésemos en un jardín; en donde sembramos lo recibido, lo concebido, para luego cosechar y porque no transformar en cosas aún más bellas de las originalmente sembradas allí.
Cuando escuchamos el rumor del bosque, el viento entre lo árboles altos, el viento como tormenta, el canto de los pájaros, los grillos, los alguaciles; al mar, al desierto, a las montañas; es como si todo los sonidos se depositaran en nuestra alma, más aún en nuestro corazón y allí rebotaran; se emitieran como un eco transformado, embellecido, perfumado por ese jardín interior, milenario, que desde hace no mucho nos está entregando sus frutos.
He ahí la música, he ahí la Novena Sinfonía de Beethoven, he ahí Las Pasiones de Bach, La Silfides de Chopen, El Adagio de Albinoni, Las Estaciones de Vivaldi, El Requiem de Mozart.
La música como el eco del cosmos en el corazón del hombre; he ahí la música como metáfora del universo, de la naturaleza, y porque no también, ahora, de eso nuevo llamado mundo
Parecería que esos sonidos capturados, retenidos, por un tiempo, como alguien que le agrega la salsa, el tuco, el condimento, a lo que ya está antes de nosotros.
La música nos lleva, nos transporta a mundos nuevos, a mundos nuevos creados por el hombre, registrados, puestos en notas, en melodías; de un universo, de un cosmos que entra en nosotros y agita como un viento al mar profundo que es el alma.
¿Qué es entonces la belleza? Porque esas notas, esas melodías son bellas, la sentimos bellas, como si ellas nos llevaran, nos transportaran a un nuevo mundo llamado espiritual; aunque resulte simple; el arte y la música en particular nos purifica, nos eleva, no hace sentir que no solo somos de carne y hueso, sino de una materia más destilada, más simple, más originaria, mas fundacional: la materia espiritual.
Porque en sí el espíritu es el que agita al alma como un mar; es el espíritu el que es capaz de elevarse, de salir, de irrumpir, al agitar la materia que por naturaleza quiere ser tierra nuevamente.
Es como si ese espíritu fuera de otra naturaleza, fuera de otro mundo, de otro universo, de otro cosmos; como si solamente nuestro ser contuviera en sí al animo, el atrevimiento, la vestidura de eso otro que nos trae entre sus alas: el arte, la música.
Nada es acabado, completo, en este mundo, en este cosmos, todo se está transformando, moviéndose, inclusive el hombre, el ser del hombre; ¿por qué no entonces deberíamos de pensar que así como la tierra recibe del universo exterior, materias nuevas, por qué no el hombre también?
Los sonidos, los recibimos constantemente aún los no registrados por el oído, los que llegan directamente a ese jardín, sin que nosotros los pudiéramos sentir y vuelven, salen, agregados, dentro de esas notas, de esos compases; algo más que luego registramos y nos sorprendemos como si fueran de otros mundos; pero en realidad lo son, están, han estado, pero son nuevos para nosotros.
¿Quién es entonces el que registra lo nuevo?
¿Quién es el que registra los nuevos colores, los que contienen un cuadro?
¿Quién es el que recibe lo que las palabras traen como nuevo?
Podríamos decir el hombre, el yo, la conciencia; pero es algo que no alcanza, no nos satisface, debería ser algo más profundo, más como nuevo también; porque si el hombre tiene ojos es porque quiere ver, si tiene odios porque quiere escuchar
Ahora esa naturaleza íntima de este ser, está creando, mejor si decimos se está formando en él, un nuevo mundo, un nuevo sistema, un nuevo órgano: La espiritualidad.

Karigüe

PRÓXIMO CAPÍTULO: lunes 30 de Mayo

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Gracias. Karigüe

viernes, 20 de mayo de 2011

Poema - Refugio

Lo natural, el arte

no he conocido
cosa tan natural
como el arte

como la flor brota del árbol
abriéndose
como el fruto encerrándose
así mismo como la tierra

como si fueran lagrimas
de los árboles,
tristezas impotentes
embalsamas allí

el dolor es el fruto
mientras la alegría es la flor

el perfume, el incienso de
esos templos erigidos en
medio del bosque

a donde e hombre
se refugia del silencio y la oscuridad.

Karigüe

miércoles, 18 de mayo de 2011

Poema - Reconciliar

dices – natural

¿es que hay otra cosa?

tan presente está todo
que lo que ves es solo la
luz de la luciérnaga
cuando se prende

Algunos dicen – oscuridad
pero es espacio libre
es donde la luz es solo
transeúnte.

pero quiero ver - insistes

¿con qué ojos?
¿con cuál de ellos? – te pregunto

conocimiento es digestión
solamente
para que permanezcas

lo otro es contemplación
desde afuera

y oración
desde adentro.

Karigüe

lunes, 16 de mayo de 2011

Libro “El arte"– Capítulo 8

LA BELLEZA

Caminos del Inca, hace unos mil quinientos años, los Incas construyeron caminos a lo largo de todo su imperio; caminos por donde corrían los chasquis llevando la información; por donde llevaban los alimentos, mercaderías, etc. todavía se puede ver algunos, se pueden también recorrer.
Son como venas, arterias, que permitían sobrevivir a ese imperio majestuoso.
Las comunicaciones en estos días se hacen de otra manera, es por el aire, por medio de satélites, por lo que una noticia puede recorrer el globo terráqueo en segundos; los otros medios se hace todavía por agua, por tierra y por aire, en aviones cada vez con mayor capacidad y cada vez más veloces.
En las tribus de la selva, aún residuo de ese gran imperio destruido, existen los habladores, aquellos que llevan las noticias, la información, de pueblo en pueblo a través de la palabra.
Así también en nuestro mundo moderno los idiomas, el habla escrita, hablada, es transportada, es comunicada en instantes.
Tenemos entonces un mundo que se integra cada vez más, un organismo que es vivo, rápido, e inteligente. Hoy por medio de internet estamos comunicados al instante, muchas veces sin saber quién es la otro persona, protegida por un seudónimo. Es decir que se está destilando la mente, los pensamientos, los conocimientos, convirtiéndose en anónimos, la inteligencia por la inteligencia en si, el conocimiento por el conocimientos en sí.
Se discuten, se intercambian, se perfeccionan, se pulen, sistemas como Linux, como las teorías cósmicas, atómicas, etc.
Por otro lado se puede considerar a la alegría del hombre, como una flor de la tierra, como una flor especial que solo brota en él.
Es como si un fluir, como si fuera una savia se eleva desde la tierra (para no ir más adentro, más a lo profundo) y es rama, flor y fruto, y es hombre, idea, inteligencia. Un mecanismo perfeccionándose es el hombre; y, un mecanismo superior que lo hace también es el mundo, perfeccionándose, por ahora con nosotros, pero si vemos como se están desarrollando las computadoras, las máquinas, veremos dentro de muy poco a la inteligencia artificial, manejando, dirigiendo, al mundo.
¿Qué es lo que los diferencia al hombre y al mundo artificial? Que ese mundo fue creado por el hombre, es su resultado, su consecuencia de millones de años de desarrollo, de evolución, pero ¿en qué momento se produce o se producirá ese desprendimiento?
Como si del árbol brotara una flor, como si el gusano se convirtiera en mariposa, como si del hombre se desprendieran las ideas, pensamientos, máquinas, máquinas inteligentes.
Nos cuesta verlo en nosotros, porque somos los que nos estamos dando cuenta de este fluir, lo estamos describiendo, tenemos la capacidad de hacerlo.
Es como si diéramos un paso al costado y salgamos de ese fluir, que no es otra cosa que la vida. Ella detrás de nosotros como pedestal y ella después de nosotros como inteligencia artificial.
La vemos, la describimos, hablamos de ella, la estudiamos; pero sin que nos demos cuenta, ella ya está arriba de nosotros, se ha, en parte esfumando.
Ese ojo llamado Hubbes, que está observando al universo, que lo esta oscultando, registrando ¿Somos aún ese ojo? Porque la información llega a computadoras y ellas nos dibujan lo registrado.
Solo nos maravillamos después, tenemos conciencia de la inmensidad, de lo bello, de lo hermoso que es el universo; porque aunque resulte extraño los ojos también siguen evolucionando, ya no ven solamente en color blanco y negro, cada vez describimos con más precisión, porque vemos la infinita gama de colores que tiene este nuestro universo.
¿No es así con los sonidos? ¿No es así con las palabras, que inicialmente poníamos: dolor y deseo en los gritos y sin embargo hay palabras como vasto que nos sumergen hasta lo todavía no imaginado? ¿No es así que ellos también evolucionan?
El arte así, entonces se convierte en lo nuevo, un mundo en donde la belleza sea como el aire que respiramos.
¿Cuánto nos costó formar las ciudades, vestirlas de confort. de placeres, de goces, de comodidades y las seguimos haciendo, las seguimos construyendo?
Deslumbro a ese mundo bello, a ese mundo transformando, llevando a estados que ya están en nuestros corazones, ya están en cada uno de los hombres.
Es como si ese fluir que es la vida esté llevando el contenido del desierto que aparentemente somos; entregamos a ese fluir, a ese río que es la vida, algo de nosotros. Somos transmisores de vida, pero a la vez le agregamos algo más, como si ese fuera el condimento, el tuco de los tallarines: la belleza
A través del arte, de ese trabajo fino del espíritu hacedor del mundo, esa alma bella de ese nuestro espíritu, que es distinta al alma del hombre. Podemos entonces ahora si decir que el mundo que está creándose a través del arte, es el mundo del espíritu de los espíritus, la destilación de ellos, que no es otra cosa que lo bello.

Karigüe

PRÓXIMO CAPÍTULO: lunes 23 de Mayo

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Gracias. Karigüe

viernes, 13 de mayo de 2011

Poema - Es sólo la mano

El cielo es hermoso
la tierra también

cómo puedes distinguir, separar
tus sueños
si ellos son como la lava
de un volcán que solo entrega

de tan profundo
es el lugar donde se funden
las cosas
que tu solo percibes y algunas
veces recibes su calor

es el que reúne
alrededor del cual nos sentamos
y sin querer nos encontramos
con la mirada del otro

de nada sirve esquivarles
es como el aire, el agua
el alimento que necesitas

el espíritu es solo la mano
del alma que la extiende
que la abre

para ser palabra.

Karigüe

miércoles, 11 de mayo de 2011

Poema - La Libertad

tan familiar es todo

tan difícil de dejar

es que el amor teje una
tela invisible que el
mismo corazón
se acostumbra a ella

es como una red
un morada
tejida como canasto

como esas palabras
que comenzaste a balbucear
para luego terminar
como esos pájaros que
abandonan el árbol
el nido

solo para sentir ese temblor
sordo y mudo
que es la libertad

la libertad que da ese
vuelo sin alas.

Karigüe

lunes, 9 de mayo de 2011

Libro “El arte"– Capítulo 7

DISECCIÓN

Si nos preguntamos ¿qué es el alma? ¿Qué es el espíritu? ¿Qué es el ser? Son preguntas de palabras. Deberíamos cambiar el ángulo y decir ¿Qué significa la palabra ser, espíritu, alma?
Nos encontramos con un paredón, algo que tenemos que franquear, o ¿es qué estamos hechos de palabras, más aún nuestro ser, lo que somos se ha ido construyendo de palabras?
Comenzamos teniendo registros, sensaciones, que fuimos almacenando; más aun digiriendo, y ese alimento, eso adquirido que no es otra cosa que experiencia pura, fue, la fuimos poniendo en alguna parte, como cuando almacenamos información en un archivo, en nuestra PC.
Podemos decir en la memoria, pero ¿en donde está ésta bendita memoria? Lo primero que se nos ocurre es en el cerebro, en ese órgano por el cual pensamos, vemos, usamos nuestra inteligencia etc., pero, pero yo no estaría tan seguro de ello, ¿Por qué?
Para dar una respuesta a esta pregunta, tenemos que ser amplios. Imaginemos que esa información, que realmente es mucha ya que se remonta a los orígenes, por lo menos de nuestra existencia; la almacenábamos como almacenamos información en Internet.
Ante todo, toda cosa que creamos, que inventamos como Internet, es una deducción, un producto, una destilación, una consecuencia de lo que vamos siendo. Nada se crea de la nada, todo es un fluir, de algo que emana de la tierra, como es la savia, como es la inteligencia del hombre.
Desde este peñasco, por así decir, podemos ver e imaginar a la vez, que nuestra experiencia, es decir lo vivido, fue almacenándose en todo el cuerpo mudo. ¿En todo nuestro cuerpo físico solamente?
Creo y considero que así nos quedaríamos en medio camino; aunque decir que la información adquirida, recibida, está en todo el cuerpo, es ya dar un salto, hacer un zanco en nuestra forma de pensar; lo cual tiene como consecuencia que esa información está en las células, en los genes, más aún en la memoria de ellos.
Pero, tenemos que seguir. ¿Tenemos otro cuerpo además del físico? El cuerpo mudo ¿es algo más que físico? Qué pregunta, por Dios.
Si, el cuerpo mudo además de lo físico tiene su propia alma, diferente a la nuestra, a la del hombre en sí.
El cuerpo mudo, antes que nosotros, el ser que lo habita, fue creado, fue formado, como toda cosa de la tierra, como todo fenómeno de ella, como es un volcán, una tormenta, una nube; pero cada cosa o cada fenómeno de ella es producto de una relación ¿con quién? Aquí hemos llegado a donde queríamos llegar. Es una relación con lo que la rodea: con el sol, con las estrellas, con la materia y energía oscura etc.
Es decir cada elemento o parte, o ser que la habita, está formado de cosmos, de universo, de una manera directa o indirecta.
Entonces nos encontramos con una grandeza: que este nuestro cuerpo mudo es ya un ser, no solamente del cual hemos brotado sino en el cual habitamos.
He ahí la grandeza, lo pesado, lo complejo que somos, ya que no solo soy yo el que piensa, el que siente, el afectivo, sino algo más, somos ese bendito cuerpo mudo, ese pedestal, esa concha, ese nido; creado, formado, por una fuerza poderosa que no me pertenece, ya que cuando ya existía el, yo recién, como hombre, como ser pensante, me fui formando.
Qué separación, que disección, tan fuerte yo y mi cuerpo mudo. Me siento como cuando Hipócrates abrió el cuerpo mudo y se encontró que no era una unidad, que era un organismo, como lo es un pueblo, un país, el mundo en sí.
Ya, ha ésta altura del camino, no me sorprende ésta división, ésta separación; lo que me atrae como un imanan, es cuando tenga que dividir, diseccionar al yo, al espíritu; y me encuentre con sus partes; que descubra que tanto el yo como el espíritu, son organismos también.
Frente a todo esto, nos encontramos como en una desolación; mejor deberíamos decir no con rocas sino con arena, no con olas sino con el encrespamiento del agua, con la excitación del agua por medio del viento, el encrespamiento de la vida por medio del tiempo.
Es como tener deseos de irse a descansar y callar; como si volviéramos de una jornada de trabajo y lo que quisiéramos es ir a descansar.
Después de un viaje con las palabras, a través de las palabras, del pensamiento, de las imágenes; como si hablar seria decir lo que ya sabemos, pero de otra forma; encontrar otra forma, otro ángulo de ver aquello que ya somos; pero, qué sin embargo no ha pasado a nuestra conciencia.
Es como si traspasáramos lo que somos a otra vasija, a otro depósito, a otra forma de depósito, de cántaro. No es entonces la palabra un cántaro que lleva de un lugar a otro, lo que somos, esa sustancia que somos. La lleva, la deja, la siembra, deberíamos decir, en ese nuevo depósito que era aparentemente desierto.
Pero he ahí que la sustancia que llevamos allí, fecunda, como fecunda el agua al desierto, el agua a la tierra. He ahí entonces el cultivo, he ahí el bosque que duerme, lo bosque que guarda todos esos infinitos acontecimientos, esas montañas, esos lagos, ese mar. Un mundo diferente, un mundo nuevo.
¿No es así ahora el alma del hombre, un mundo nuevo? ¿No es así el mundo en sí? Pero más aun ¿No es así el mundo espiritual del hombre?
Es mundo ya no creado por la palabra sino por el arte.
¿No deslumbramos ya la disección del espíritu? ¿En espíritu hacedor, obrador, creador; y, espíritu puro, bello, divino, sagrado, que el arte en sí construye?

Karigüe

PRÓXIMO CAPÍTULO: lunes 16 de Mayo

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viernes, 6 de mayo de 2011

Poema - Cielo del alma

El cielo del alma,

en el cielo del alma crecen
los sentimientos como flores
en un bosque

todo aquello que ves y no puedes
tocar, vive allí

una tierra invertida,
como el cráneo que impide
que el agua de tu cuerpo
convertida en sangre, se vaya

allí nuevamente el rayo,
pero ahora más sutil,
el trueno pero ahora palabra

lluvia casi transparente
delicada e invertida
riega ese nuevo valle

en donde el dolor
se condensa en lágrimas.

Karigüe

miércoles, 4 de mayo de 2011

Poema - He brotado

A veces
has caminado por el desierto
que era

cuando los alacranes se
mimetizaban entre las piedras

más allá las montañas

era como si la misma montaña
se hubiera desgranado
en piedras y tierra

o si la misma montaña se
hubiera elevado del desierto
solidificándose desde
abajo

o si las montañas fueran
un latido retenido de
la tierra misma cuando
respira

de una u otra manera
respetaba el lugar

más aún lo amaba

porque siento
que de ellos he brotado.

Karigüe

lunes, 2 de mayo de 2011

Libro “El arte"– Capítulo 6

EL SER EN SÍ

Los colores, los sonidos, las palabras, parecieran estar emparentadas, relacionadas; sabemos que es uno el origen, lo encontramos en la naturaleza.
Los sonidos pareciera que están también en los animales; los animales los escuchan; pero no sabemos si lo colores, menos si tienen palabras, es decir sonidos con sentido, pero poco a poco estamos descubriendo que sí, que algunos animales las tienen como los delfines, los pájaros, el perro.
Pero ¿qué es lo que nos deferencia de ellos? Tal vez porque pensamos, porque tenemos ideas; pero en sí también, no sabemos si los animales los tienen.
Así que concentrémonos en el hombre, el hombre ve las formas y los colores, escucha los sonidos, pronuncia, pero más que pronuncia escucha y emite palabras en donde deposita lo que siente, lo que quiere, lo que sueña etc., es decir todo un mundo interior, que sin lugar a dudas es más rico que el de otros animales.
¿No será que toda esa riqueza se ha ido almacenando dentro del alma del este animal, y se ha ido decantando a la vez; y, hoy tenemos como una vida extra, una vida dentro de otro vida, una vida inteligente, afectiva?
Como cuando en la tierra ese calor atrapado fue fundiendo a las piedras o rocas próximas; pero que algo igualmente quedó atrapado, hirviendo en ella; siendo ahora que emite bocanadas de vida, de existencia, como es la lava a través de los volcanes.
¿No habrá pasado así también en el hombre? Nacemos, somos creados con una determinada energía, luego somos recubiertos por el cuerpo y de vez en cuando emitimos ideas, pensamientos, etc., como si ellos fueran lava, solo por un tiempo, como lo emite la tierra también.
Pero en el hombre se produce un cambio extra, comienza a realimentarse con los demás; los otros le van dando, donando cosas, ideas, pensamientos y porque no hasta sentimientos.
¿Será que la tierra también de vez en cuando recibe meteoritos desde afuera, de los otros astros, como realimento? No nos damos cuenta porque los tiempos son diferentes.
En el hombre, ese intercambio de cosas, con los otros, crea, forma órganos, deberíamos decir organismos, grupos de hombres, podríamos decir hasta países que hacen, que forman, que crean funciones, como si fueran partes de un cuerpo, de ese cuerpo al que lo hemos llamado humanidad.
El yo nuevo, se erige sobre ésta realidad, sobre ésta realidad a la que podemos llamar el tu; la comienza a describir, a decir, a escucharla; pero lo más importante a pulirla.
Al sacar de ella los pedazos de roca, de mármol, les da forma; pule también los sonidos, dándoles forma de palabras y juega con los colores dándoles no solamente forma, sino combinándolos, convirtiéndolos, en imágenes que hablen.
Es decir va produciendo una transformación, como cuando el gusano abre su caparazón y es mariposa; cómo cuando la savia es flor, es belleza. Es como si fuéramos formando un nuevo tu, una nueva realidad, una realidad formada, pulida, por esa fuerza interior llamado el yo, llamado el espíritu.
¿No es de ella, desde donde brota la más bella de las flores que pueden crecer sobre la tierra y que solo brota en el hombre? Esa flor se llama: alegría.
Es como el perfume, como la atmósfera que respira ese hombre nuevo, es aquella flor que es fruto cuando el músico convierte la belleza de la naturaleza en melodía, como cuando el pintor la atrapa en un cuadro y la hace decir; como cuando el poeta la atrapa en un poema, y la hace decir cosas, como si fueran ladrillos, adoquines, que son pilares, paredes y techo de ese nuevo templo en el cual crece, en el cual está creciendo el corazón de ese hombre nuevo: lo sagrado.
Y ¿qué ese eso sagrado? No es mas que el Ser del ser del hombre, es decir lo que es, pero con más claridad, con mayor pureza.
Lo vemos a través del arte, lo vemos, lo sentimos con más calidad; pareciera que nuestra evolución, nuestro sentido es un encuentro, una mayor conciencia de que somos una presencia del Ser sobre la tierra. Somos el Ser en sí.

Karigüe

PRÓXIMO CAPÍTULO: lunes 9 de Mayo

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