sábado, 28 de febrero de 2009

Frases Celebres sobre el Tiempo (II)

1.- El tiempo es un río que forma los acontecimientos. (Aurelio)

2.- De nada sirve correr; lo que conviene es partir a tiempo. (La Fontain)

3.- El futuro nos tortura, y el pasado nos encadena. He ahí por qué se nos escapa el presente. (Flaubert)

4.- No hay que hacer de prisa lo que es para siempre. (Thomas Mann)

5.- Con el tiempo es mejor una verdad dolorosa que una mentira útil. (Thomas Mann)

6.- El secreto de vivir mucho tiempo es vivir lentamente. (Ludwin Feverbach)

7.- Lleva tiempo llegar a ser joven. (Pablo Picasso)

8.- Aunque el final del mundo sea mañana, hoy plantaré manzanos en mi huerto. (Lucero)

9.- El instante es la continuidad del tiempo, pues une el tiempo pasado con el tiempo futuro. (Aristóteles)

10.- Desdichado el que duerme en la mañana. (Hesiodo)

Las Frases Célebres del Tiempo o Citas Célebres del Tiempo fueron especialmente seleccionadas por Karigüe para sus lectores. (Frases del Tiempo y Citas del Tiempo)

Poems in English - Men

Worldly things
happen or are, sometimes
like rainless tornadoes,

They lift dust
off the road edges,
not only preventing to see
but the sunlight from bathing our skin.

Life is the Sun,
the air
and the blessed Earth,
which feeds us

But- but
God, many times
steps backwards
becoming the World

And

You, who have to stay in its place
complain and even cry
saying:
Why have you deserted me?

For you to be a Man!, you tend to hear.

Karigüe



(El Hombre

Las cosas del mundo,
suceden o son, a veces
como tornados sin lluvia,

Levantan polvo
en la vera de los caminos,
como impidiendo no
sólo ver, sino que
la luz del sol bañe nuestra piel.

Vida es el sol
el aire
y la tierra bendita
que nos alimenta.

Pero, pero
El Dios, mucha veces
se retira
Formándose mundo

Y

Tú que tiene que
ocupar su lugar
Te quejas y hasta lloras
y dices:
¿Por qué me haz abandonado?

¡Para que seas Hombre! – sueles escuchar.

Karigüe)

Poema - Nueva mente

Cuando el mundo se abre
y te entrega extrañas formas
de vivir
de pensar

Es como un hilo de sangre,
un pequeño arroyo
que va formándose del
deshilo o de la conversación

baja como besando
al desierto
a través de la orillas

Crecen, brotan
arbustos
como frutos

Aún antes de llegar
al mar, será cultivo
ciudad

Mundo,
nueva mente.

Karigüe

Poema - La profundidad

Tan profundo es el mundo
y el hombre

que puedes pasar una vida,
sin siquiera ver
la tierra desde donde
brotan.

Luego dices saber;
pero cuando te preguntan
miras para otro lado

Tan profundo es el mundo
y el hombre

que cuando me despierto
y veo a mis hijos
jugar

Juego con ellos
como otro niño.

Karigüe

viernes, 27 de febrero de 2009

Libro “Cuando se retira la ola” – Capítulo 2

LA OBRA

Muchas veces nos encontramos con un estado desolador, sin olas, sin vida; porque con frecuencia nos enredamos; sí, si como si fuera un ovillo de hilo, de lana, que no tiene orden, que no tiene forma.
Nos sorprendemos cuando vemos algo deforme, sin forma conocida. Ello es la base de la segregación, del separarse de lo que no es como uno, de lo diferente; así como lo hacemos con las personas, con mayor frecuencia lo hacemos con los hechos, con las cosas, con las ideas.
Una idea bella, un pensamiento agradable, un poema, una melodía, una pintura, son cosas que nos agradan porque ya tenemos un canon, un estructura heredada, lograda, pulida, por nuestros antepasados y por nosotros mismos.
Hay un dicho Ingles que dice: “Big changes are not good changes” “Grandes cambios no son bueno cambios” Por otro lado nos dicen lo Griegos Clásicos que la madre de todas las virtudes es la prudencia.
Todo este trabajo, toda esta experiencia cementada, tamizada, es la que nos lleva a vivir un poco mejor, a tener una calidad de vida cada vez mejor.
Pero, a la vez, tenemos que dar un paso más adelante, pequeño tal vez; tenemos que avanzar, tenemos que crear nuevas cosas, nuevas ideas; por placer y porque vida es una ola que no puede detenerse. El ánimo, el entusiasmo, la alegría; la aceptación de reglas, de cánones, que tiene ésta vida, tienen que ser respetadas también.
Adentrarnos ¡Qué palabra! Es así, como caminar en punta de pie sin hacer olas, sin despertar a nadie, sin que inclusive los demás se den cuenta; avanzamos, conocemos, nombramos, escarbamos. Cómo quién planta un árbol, tenemos que cavar un agujero, no tan profundo, suficiente como para que entren las raíces y después dejarlo, cubrirlo, regarlo cuando no llueve, ponerle tutores cuando es pequeño, aunque algunos no los necesitan.
Y dejar, dejar que la madre naturaleza se encargue de ello. Ella hace realmente su trabajo; nosotros, se podría decir, somos los ayudantes, los parteros en último caso.
¿No es así también, con la obra, con las ideas, con el talento? Podría decir que sí. Uno lee; leer es como sembrar la semilla, cosas, ideas, pensamientos, conceptos, figuras, metáforas, sentimiento, etc. Son muchas cosas las que entran por los sentidos y luego las digerimos, las plantamos, y la madre naturaleza nuevamente se encarga, hace el trabajo. Ahora le podemos decir; cuerpo, mente; pero es solo nombres de aquello que somos, de aquello que ya somos.
El agua, la bendita agua. No sabemos sí es femenina ó masculina; es ella cuando nos alimenta, nos riega; pero otra, cuando nos causa placer, el placer de apagar la sed. Somos casi agua, salvo por un 30% que es la tierra arrastrada, llevada, sostenida, suspendida.
Deberíamos imaginarnos como un río que lleva en suspensión materia, algunos troncos, barro, tierra, maleza, pescados; pero ese río es circular. Bueno, el agua recorre la tierra en círculos: el mar, la nube, el viento que la lleva a las montañas y la deja ahí, como si fuera solo un medio de transporte, luego cae y es río, río que vuelve al mar. Así en nuestro cuerpo, ésta agua bendita es sangre, es liquido encéfalo raquídeo también.
Y es una cosa muy especial, miremos por qué. Una gota de rocío es algo maravilloso; más aun, cuando el sol de la mañana brilla en ella. Los rayos del sol se dispersan en tantos colores como el arco iris, parece un diamante, un diamante flexible, delicado; rueda cuando se forma sobre una hoja y el viento la mueve, cae; cae como si fuera una lágrima, una gota de agua que se pierde rápidamente en el suelo sediento.
Una lagrima, es causada por lo general por el dolor, es como si el mismo dolor se condensara, como si nuestro corazón que sufre se expresara por medio de las lágrimas, es o debe de ser como un idioma para él.
Este río, tiene brazos sumergidos tan profundamente que se vuelve invisibles para los sentidos del hombre; no sólo los del cuerpo sino los del alma, e inclusive los del espíritu.
Se maceran, maduran, se fermentan en las galerías más profundas de nuestro ser, como sí esas profundidades fueran la tierra; y algo, algo así como pelos absorbentes, extraen, chupan, los minerales; pero el vehículo, el vehículo es el agua, es la sangre, es algo más profundo en el hombre: el dolor.
Si aquel tan mentado, pero poco conocido, y que pasa desapercibido; hasta que un hecho lo vuelve nítido, lo viste, lo presenta en sociedad, y no es eso otra cosa que una lagrima, el dolor hecho realidad a través de una lagrima, la más sana de las formas de presentarse
Una lágrima vendría a ser como una flor, como un fruto, hasta tiene la forma de una pera, de ahí tal vez viene la palabra esperanza.
El origen de toda palabra, son varios, no sólo el etimológico, el deducido, sino aquellos nombres que se vuelven a nombrar nuevamente, no repetir sino recrear; porque si cambia el mundo, cómo vamos amordazarnos con las mismas palabras de siempre y más aun con los mismos significados.
Toda palabra es viva y por lo tanto tiene que renovarse constantemente.
Sigamos con lo nuestro. Aquello oscuro que es la tierra y de la cual sabemos tan poco; pero sí es por la savia, por la vida, sabemos solo que la planta, el árbol, tiene pelos absorbentes que le extrae la leche, el alimento, usando como vehículo el agua.
Pero vemos otra cosa interesante; más arriba dijimos que, la nube que se elevó del mar, es llevada, es transportada, por el viento hasta la tierra, hasta las montañas, en las cuales tras un poco de reposo, casi como un beso que le dan a las montañas, caen y es lluvia.
El agua transporta los alimentos; pero no es agua sólo el alimento, está mezclada, en eso que llamamos savia. Lo mismo la nube ella si bien es agua, pero es agua cargada con electricidad, como si llevaría la espada en alto y luego se enredan en luchas inútiles, y es luz, trueno, fuego, que inclusive encienden a los árboles secos, como quien enciende una vela, un tea.
Qué agua bendita, estas nubes; pero el viento es como otra vida, creada por la variación de presiones, temperaturas del aire; ese aire está formado por Oxigeno, por Hidrógeno, Helio, y lo más importante: Nitrógeno, aquello que es tierra, tierra.
El Oxigeno es el alimento del hombre, es aquello que entra en sus pulmones y purifica ese otro río de vida que es la sangre, la limpia.
Este bendito aire es el vehículo de transporte de las nubes, es como el agua de la savia.
La agua y el aire, la tierra, el fuego, podemos compararlas, podemos decir que son los elementos primeros y en realidad lo estamos diciendo desde hace mucho tiempo
Pero, qué es lo nuevo, ese otro nivel, un nivel superior, otra órbita: la savia, el viento, la vida.
Y si nos seguimos adentrando, podremos ver a la planta, al animal, al hombre.
Y si seguimos más aún, podremos ver la obra, la maravillosa obra del hombre: el mundo.

Karigüe


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Gracias. Karigüe

Poema - Cosecha

Exaltado estas
cuando entras
a un recinto nuevo

Niño vuelves a ser

y

toda la naturaleza de lo vivido
va a tu encuentro

verso, poemas
son flores que arrancas
con la mano
que escribes

has visto,
que a medida
que cosechas más,
las flores son más frescas
y de colores más vivos

Sí diste vida
cosecharás vida.

Karigüe

viernes, 20 de febrero de 2009

Poema - Hoy, Aquí

Cuando los rayos del sol
iluminan el vacío
no existe la luz

sólo el polvo de estrellas
los escombros que el universo contiene
reflejan la luz
que ves

tu espíritu es un sol naciente
puros son los rayos,
el mundo y sus cosas
reflejan su luz para
que veas

Hemos conseguido, logrado
construir nuestros ojos
para ver

lo maravilloso
de estar,
hoy, aquí.

Karigüe

Libro “Cuando se retira la ola” – Capítulo 1

EL HOMBRE

Cuando se retira la ola, la ola de la vida, deja a su paso vida, vida al descubierto ¿No es una ola, una sola ola, la que se retira, cuando el agua se retira de la tierra?
Podemos imaginar, pensar, suponer, que la llegada del agua a la tierra fue una ola, que ahora lentamente se está retirando. Por otro lado vemos cómo el sol la evapora, los vientos la agitan, la llevan de una parte a otra, de un lugar a otro, mientras ella resiste; ya sea cambiando de estado, agarrándose como garrapata en ese vientre maternal que es la tierra.
Podemos ver su recorrido, sus orbitas, aquí; pero ¿cómo será su recorrido, su amplia órbita, en el universo?
Lo otro, el otro, por ejemplo el sol, la incita, la exista, la expulsa, de su territorio árido por naturaleza.
¿Es entonces el agua algo extraño, es lo otro que ha llagado, que no es de aquí, un forastero podríamos decir?
Sabemos ya que hay cuatro elementos básicos. El fuego (Heráclito), el agua (Tales), el viento (Empedocles) y la tierra (Esiodo).
Cuatro elementos básicos, cada uno de ellos está formando por átomos, electrones, quartz, fotones, etc. La combinación de ellos es lo que está, lo que vemos, analizamos, lo químico, lo físico.
Además, nos hemos ido dando cuenta, que existe, por lo menos dentro del hombre: temores, deseos, necesidades, sueños, esperanzas, amor, odio, venganza, etc. Las sombras como oportunamente las hemos nombrado.
La combinación de estos dos grupos, el intercambio, en último caso el compartir espacios y tiempo, hace lo que hemos llamado vida, mundo.
Hasta ahora vamos bien; pero sucede que hay como una mano que moldea, como un programa ya establecido, pero por sus dimensiones y alcances es imposible que entren en nuestra todavía temprana y débil mente, alma.
Pero no por ello disminuye la necesidad, el deseo de seguir avanzando; de investigar, de soñar, de imaginar, de crear fantasías no solo como goce sino como punta de lanza del conocimiento.
Todas estas cosas secundarias son las que están permitiendo que tengamos una claro en el bosque y allí acampamos, allí convivimos con el semejante, con el otro; con el universo convirtiéndolo en mundo.
Si bien la cultura es convertir a la naturaleza en algo útil: el mundo, la humanidad, es convertir al universo en algo no solamente útil sino bello.
No hace falta más que ver, para entender y comprender que esto es así.
Adentrémonos un poco más en el juego de los elementos básicos.
Recuerdo los vientos de Agosto en mi casa de niño, veía doblarse a los Eucaliptos, emitir como alaridos agudos cuando el viento mismo quería arrancarles sus hojas; ellos se resistía, se doblaba; y, el brillo del sol sobre las hojas, que danzaban, era como cuando el sol brilla sobre el lago, sobre esas olas diminutas que el viento arrancaba de su piel. Y al salir a la calle sentía el golpeteo de granos de arena sobre mi rostro; el viento levantaba el polvo, la arena, y me cubría como niebla, me sentía como dentro de una nube; era como si el mismo viento me empujase, me quisiese derribar, llevarme como a las hojas.
¡Que hermosos recuerdos! Había otro, cuando llovía, cuando las gotas de lluvia caían sobre las calaminas, sobre los techos y hacían ladrar a las chapas de acero; como una ametralladora llegaban las gotas de agua; a veces eran grandes, otras diminutas; algunas veces llegaban de golpe y tenía que correr para sacar la ropa del cordel para que no se mojase, esa era la misión que tenia en la casa; salía corriendo al patio y la lluvia caía, jugaba a saber quién ganaba; si ella alcanzaba a mojarla o yo la salvaba. Quedaba muchas veces totalmente mojado y luego con una taza de café caliente me sentaba en el comedor y veía por la puerta; ahora si, cómo la lluvia mojaba todo, tomando la forma de una serpiente, avanzaba arrastrándose a su lugar, a la zona más onda, siempre hacia abajo, hacia el mar.
Y después; sí así se llama un poema de Karigüe, después de la lluvia el campo es más claro, más transparente, más puro, y el brillo del sol, más nítido. Aquí el poema:

Después…

En el atardecer
después de la lluvia..
el sol:
claridad transparente,
plateada.

Como si brotara luz de entre los árboles,
de entre las montañas,
de entre las nubes.

Como si se hundiera
la naturaleza desnuda virginal
en el horizonte.

Crisol de oro ardiente.

También Bosco en su libro “Malicroix” nos entrega una reflexión interesante sobre el fuego:

“Una lengua viva subía, balanceándose en el aire negro como el alma misma del fuego. Esta criatura vivía al ras del suelo, sobre su viejo hogar de ladrillos. Vivía allí pacientemente, con la tenacidad de los pequeños fuegos que duran y ahondan despacio las cenizas. Era uno de esos fuegos de un antiguo origen que nunca han dejado de ser alimentados, y cuya vida persiste, al abrigo de la ceniza, sobre el mismo hogar, desde años innumerables. Esos fuegos tiene tal poder sobre nuestra memoria que las vidas inmemoriales que dormitan más allá de los más viejos recuerdos se despiertan en nosotros ante su llama, revelándonos los territorios más profundos de nuestra alma secreta. Ilumina por sí solos, más allá del tiempo que preside nuestra existencia, los días anteriores a nuestros días y los pensamientos incognoscibles de los cuales nuestro pensamiento no es quizá sino una sombra. Contemplando esos fuegos asociados al hombre durante milenios de fuego, perdemos el sentido de la huída de las cosas; el tiempo se sumerge en la ausencia; y las horas nos abandonan sin sacudimiento. Lo que fue, lo que es, lo que será, devienen, fundiéndose, la presencia misma del ser; y nada más, en el alma encantada, la distingue de si misma, salvo quizás la sensación infinita pura de su existencia. No afirmamos para nada que somos; pero queda todavía un resplandor ligero de que somos. ¿Seré?, murmuramos, y solo quedamos aferrados a la vida de este mundo por esa duda, apenas formulada. De humano en nosotros sólo queda el calor, porque ya no vemos la llama que lo comunica. Somos nosotros mismos ese fuego familiar que arde a ras del suelo desde la aurora de los tiempos, pero del cual siempre se levanta una punta viva por encima del hogar donde vela la amistad de los hombres”

Todo ello, todos ellos, elementos del cosmos, estuvieron antes que llegásemos nosotros. Son como el nido, que alguien preparó para que la vida, el hombre, el mundo, sean.
Por otro lado las sombras, tal vez, estuvieron siempre, estuvieron formando, siendo partes, de ese vacío en donde el big bang se explayó.
El universo, en si, es una ola que se retira para dejar al descubierto, para darles forma a estas benditas sombras. Cómo cuando se retira una ola del mar y quedan algunas almejas al descubierto y presurosas se sumergen en la arena.
Pero lo interesante, por este camino de pura imaginación, sueño y fantasía, es ver a través de él, tratar de ver como se enlazan estos dos grupos de elementos, como hacen un entretejido, capaz de contener al hombre, a la palabra, a la idea.
Al observar a una planta es más simple. Pero imaginar y suponer al hombre parte de este proceso es más complejo, más saludable, más necesario ya que es vernos de una cierta manera.
La savia, que después es sangre en el hombre, se eleva de sí es sacada, es tirada, estirada, extraída de la tierra por esas garras llamadas pelos absorbentes y llevada en contra de la fuerza de gravedad; es por lo tanto, si bien no más fuerte, pero si más sagaz, se esconde dentro del cuerpo, del tronco del árbol y desde allí llega a lo alto, convirtiéndose en flor y fruto o simplemente en perfume.
Pero el hombre ya es como el cactus, saca el agua del medio, del medio ambiente, ya no sale de las profundidades y eleva al éter, a los cielos; sino que su sangre así se llama ahora esa savia roja, circula, recorre su cuerpo, impulsada por un motor llamado corazón. Ya no es más atraída por astros celestiales; ahora esa savia roja es autoimpulsada. Nació, broto, otro astro en el universo: el animal, el hombre.
Si podemos imaginar un poco más, podríamos suponer que la sangre de ese otro ser superior al hombre llamado mundo, es algo más sutil, es el lenguaje, las comunicaciones.
Muy bien, muy, bien pero todo esto es, sí bien físico, también metafísico. La otra vertiente el polen, de él nos podríamos preguntar: ¿llegó de otro lado o tomó su lugar, como el hombre tomó a la tierra, a la cueva como suya, porque estaba vacía o la tierra misma le hizo un lugarcito, le preparó una cuna?
¿No es así el cuerpo físico del hombre para las sombras?
De todas maneras ellas tomaron ésta morada como suya, e hicieron de ella algo útil: el hombre.

Karigüe


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Gracias. Karigüe

jueves, 19 de febrero de 2009

Poems in English - Life

I’ve fought and you know I’ve done it.

But, how much time
unconsumed?

Now it gazes at me
among the bushes in the forest.

It is like a wolf
I have failed to feed.

I’ve lost my time,
stripping the leaves off
the tree of life
without eating its fruit.

Time- time I’ve had
Time is what I crave for


Past, desire
and hope

River of life
from which its bottom remains.

Cradle and grave
and
water, running:
Life.

Karigüe



(La Vida

Luché y tú sabes que lo hice.

Pero ¿cuánto tiempo
no consumido?

Ahora el me mira
entre los arbustos del bosque.

Es como un lobo
al que no le di de comer.

Perdí mi tiempo,
deshojando el árbol
de la vida,
sin comer el fruto.

Tiempo, tiempo tuve
Tiempo es lo que deseo

Pasado, deseo
y esperanza

Río de la vida
del que queda la cuenca.

Cuna y tumba
y
agua que pasa:

vida.

Karigüe)

miércoles, 18 de febrero de 2009

Poema - Lautaro

Ha brotado
un nuevo pimpollo
en el jardín
de mis ensueños

Lo veo caminar conmigo
jugar
escuchándolo balbucear
corretear

Vida, simplemente vida
que quisiera ver

me quedaría
contemplándolo
una eternidad

actuar, decir
pensar, amar

Una vida de otra vida
el pasado y el futuro
en un rostro

en el rostro de Lautaro.

Karigüe

martes, 17 de febrero de 2009

Poema - Palabras

La burbuja
es aire rodeado
de agua

una lágrima
una gota de rocío
es agua
dentro de un esfera

ellas reflejan al sol
de tal manera
que lo dividen
en colores

mi vida
y aún mi espíritu
también

pero en palabras.

Karigüe

martes, 10 de febrero de 2009

Poems in English - Art

“Around the hero- tragedy;
Around God- the World?”

Nietzsche

Around men- beauty.

The Earth, water,
fire and ether.

The sea like a feeling,
Clouds like thoughts

And
the piece of thunder-
the idea,

Illuminating men

turning them-
into beauty.

Karigüe



(El Arte

“Alrededor del héroe, la tragedia,
Alrededor de Dios, ¿El mundo?”

Nietzsche

Alrededor del hombre, la belleza.

Tierra, agua,
fuego y éter.

Mar como sentimiento
Nube como pensamiento

Y
el rayo
la idea,

Iluminando al hombre

Convirtiéndolo,

en belleza.

Karigüe)

Poema - Idioma

Nos sentamos ahora
alrededor de lo bello
como antes
alrededor del fuego

El frío, el hambre
la oscuridad y
lo que se oculta en ella
nos une

Compartimos intereses
sueños y además
tejemos fantasías

Así como el pájaro es
una hoja desprendida del árbol de la vida
que se eleva

Así tu y yo, conversamos

El Idioma
¿Son alas?

Karigüe


23 de abril, día internacional del Idioma. (Búsquedas relacionadas: poesia al Idioma, poesias al Idioma, poesias del Idioma, poesías Idioma, poesia Idioma, poemas al Idioma, poemas del Idioma, poemas Idioma, poema Idioma, poema al día internacional del Idioma)